El 14 de diciembre de 1788, al morir su padre, Carlos III, Carlos IV se convirtió en rey de España. Como parte de los festejos que en abril del año siguiente se hicieron en Quito por su coronación, don Mariano Donoso, entonces alférez real de Quito, mandó fabricar una medalla conmemorativa, de las conocidas como de proclama.
La pieza muestra, en el anverso, el busto del nuevo monarca rodeado por la inscripción "CAROL.IV.D.G.HISP.ETIND.R.PROCLAM.QUITO". Al reverso aparece la inscripción "A. MARIANO DONOSO SIGNIF.MAIORI,ANN.1789", que rodea el escudo de armas de la ciudad de Quito.
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| Medalla-proclama de Carlos IV, Quito, 1789 (imagen tomada de Melvin Hoyos La Moneda Ecuatoriana a través de los tiempos, Guayaquil, Poligráfica, 2016, p. 58 |
Federico González Suárez se refiere a esta medalla e indica que fue acuñada en Quito (Historia General de la República del Ecuador, Quito, Imprenta del Clero, 1894, tomo V, p. 355, nota 11). En realidad, como hace notar Melvin Hoyos en su historia de la moneda ecuatoriana (La Moneda Ecuatoriana a través de los tiempos, Guayaquil, Poligráfica, 2016, p. 57), el término acuñación no es el aplicable a este caso.
En efecto, en ese entonces no había casa de acuñación en Quito y, revisada la medalla, se ve que se trata de una pieza fundida, siendo la fundición una actividad presente en la ciudad y en la Audiencia, en muchos casos realizada por falsificadores de moneda. "Es probable, dice Melvin Hoyos, que el mencionado alférez real hiciera trabajar la proclama con alguno de estos hábiles artesanos".
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