Italo Bongiovanni
Pocos sectores de la filatelia han gozado de una
popularidad tan generalizada y constante como el dedicado al correo aéreo. Pero
es claro que desde hace pocos años se asiste a una pérdida progresiva del
interés por este sector, que empieza a ser reemplazado por otros más modernos,
más ágiles y, sin duda, más económicos. Personalmente creo que la verdadera
causa de este desenamoramiento tiene su origen en el hecho de que la
aerofilatelia clásica se convirtió en un "pasatiempo de reyes", es
decir, solo al alcance de personas con amplias posibilidades económicas que
vieron además en ésta una oportunidad para inversiones lucrativas, si atendemos
al constante incremento de precios.
Con estas consideraciones es fácil comprender
cómo la historial de la aerofilatelia se partió en dos, de un lado los que
compran en las subastas internacionales, y del otro los que encuentran piezas
en e-bay o en remates nacionales, muchos más accesibles. Valgan por lo tanto
algunas consideraciones y consejos para los coleccionistas que quieren afrontar
el tema y que pertenecen a este segundo grupo.
Tarjeta trasnportada en el primer vuelo postal en el Ecuador, entre Guayaquil y Cuenca, el 4 de noviembre de 1920 |
Hay un primer grupo de coleccionistas que juntan
todas las emisiones, completan series y "llenan huecos", y un segundo
grupo que quiere “construir una colección que desarrolle un tema relacionado
con la aerofilatelia”. Para estos últimos, la primera consideración que deben
hacer es la relacionada con extensión del sector aerofilatélico y con las
numerosas fascinantes oportunidades que ofrece. Se necesita, por lo tanto
sentarse en el escritorio y hacer una selección, para planear una colección
“realizable”. Fundamentales se revelan las reglas que Italphil, de Roma, y
Harmers, de Londres, repiten en todos sus análisis del mercado:
- Elegir un sector especifico que permita
cumplir metas en el tiempo, sin apuro y en relación con las propias capacidades
económicas.
- Comprar siempre una pieza clave que sea el eje
central de la colección, mientras no exceda el valor de catalogo y en función
de su calidad.
- No dejarse atraer por piezas que están afuera
de los objetivos pre-determinados, a pesar de su atractivo. ¡Autodisciplina!!
La parte más difícil es la definición de los
límites de la empresa, para lo cual deben tomarse en cuenta las dificultades de
la misma, anticipadamente y no a posteriori.
Tarjeta del Esperimento Posta Erea de mayo de 197, vuelo Turin-Roma, franqueado con la primera estampilla que se emitió para el correo aéreo |
En este punto vamos a presentar algunas
posibilidades que se ofrecen y que esperamos sean útiles a quien lee:
- En un mundo económica y culturalmente
globalizado, no es fundamental recoger material del propio país. Las naciones
europeas tuvieron varias colonias y ese material puede revelar auténticas
rarezas.
- Un vuelo históricamente interesante puede
haber cruzado diferentes países, que hicieron aerogramas o emisiones
especificas. Sirvan como ejemplo el vuelo transatlántico de Italo Balbo, desde
Italia hasta Chicago, en 1933, o el raid de Ross y Keith Smith, desde
Inglaterra hasta Melbourne, en 1919-1920.
- Los vuelos hechos con una máquina determinad,
como aerostatos o dirigibles. La historia de estos últimos es espectacular:
primeros en cruzar el Atlántico, primeros al polo norte, y es posible limitarse
a los vuelos de un solo dirigible.
- Los vuelos de un solo piloto realizados en
cualquier punto del globo. En este caso las posibilidades son casi
infinitas.
- Coleccionar el primer vuelo de diferentes
países.
- Coleccionar correo recuperado en vuelos
accidentados.
- La historia aérea de regiones como Terranova,
que vio varios intentos de vuelo para cruzar el Atlántico.
- La historia aeropostal de una línea aérea, que
presente los vuelos que abrieron rutas civiles.
- Vuelos especiales, entre los cuales se puede
tomar en cuenta a los presidenciales.
Para completar esta nota sobre la aerofilatelia,
no se puede olvidar la extraordinaria colección de Augustine Fitzgerald. Si
viajan a Londres, visiten el British Museum, donde podrán admirar la más famosa
colección de aerofilatelia del mundo.
Gracias por sus notas. Particularmente conservo aproximadamente dos mil estampillas de muchas partyes del mundo, sin tema central. Además un sobre de correo rescatdo del avión de AVIANCA HK 18-03 explotado en el aire por orden del narcotraficante Pablo Escobar en Soacha cerca a Bogotá, Colombia en Nov 27 1989. El sobre fué colocado en Miami con destino Palmira a 24 Kilómetros de Cali. Colombia. Vivo en Orlando, Florida.
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