domingo, 29 de mayo de 2016

LA EXPOSICIÓN DE NUEVA YORK ESTÁ ABIERTA AL PÚBLICO

Con la ceremonia inaugural realizada la mañana de este sábado 29 de mayo, la Exposición Filatélica Internacional de Nueva York abrió sus puertas y podrá ser visitada hasta el próximo 4 de junio en el Javits Center, en Manhattan.

El interior del Javits Center, sede de la Exposición Internacional Nueva York 2016 (foto Fabrice Fouchard)

Durante el acto inaugural se rindieron honores a la Armada de los Estados Unidos, pues en estos mismos días se celebra en Nueva York la XXVIII Semana de la Flota. Fue precisamente una guardia de la Armada la que acompañó a la bandera norteamericana a su ingreso a la sala en la que se realizaba la ceremonia, y fue el comandante Dan Smith quien cantó el himno nacional.

La Semana de la Flota fue motivo para que se dirijan al público asistente a la ceremonia el Vicealmirante Joseph P. Mulloy y el Almirante Thomas B. Fargo. Este último se autodefinió como un "coleccionista de caja de zapatos" (a shoebox collector) y se refirió a su gusto por coleccionar estampillas y tarjetas de béisbol.

Parte del público asistente a la ceremonia inaugural (tomado del blog de la Comisión de Filatelia Tradicional FIAF)

El acto continuó con las palabras del Presidente de la Exposición, Wade Saadi, y del Vicepresidente Ejecutivo del Servicio Postal de los Estados Unidos, James P. Cochrane. Concluidas las palabras de este último, se produjo una escena muy del estilo norteamericano: se presentó en la sala uno de los padres fundadores de los Estados Unidos, Alexander Hamilton, quien habló de su vida y mostró a los presentes la estampilla emitida en su honor en 1956 (Scott 1053).

Luego se dirigió a los presentes Stuart Weitzman, el propietario del centavo magenta, la estampilla más famosa del mundo que es uno de los atractivos de la exposición (ver el enlace CENTAVO MAGENTA).

La ceremonia concluyó con el tradicional corte de cinta, a cargo de Wade Saadi, acompañado por todos los integrantes de la mesa directiva del acto, incluido Alexander Hamilton.

Wade Saadi, Presidente de la Exposición, corta la cinta y declara inaugurado el certamen (tomado de NY2016)

EMPIEZA EL TRABAJO DEL JURADO

Cincuenta y nueve personas, seis de ellas en calidad de jurados aprendices, integran el equipo que juzgará las setecientas colecciones que se exhiben en Nueva York 2016. Si bien todas ellas han venido trabajando ya con el material entregado al inscribirse las colecciones, una vez inaugurada la Exposición deben encargarse de la tarea más ardua: examinar y juzgar una por una las colecciones que les hayan sido asignadas.

No hemos tenido acceso a la composición de los grupos de juzgamiento, pero gracias al blog de la Comisión de Filatelia Tradicional de la FIAF, dirigido por Walter Britz, quien se encuentra en Nueva York, sabemos de la conformación de dos grupos que se encargarán de juzgar las colecciones de filatelia tradicional y de historia postal, correspondientes a los países americanos.

El grupo encargado de las colecciones de filatelia tradicional lo integran Luis Fernando Díaz (Costa Rica), Santiago Cruz Arboleda (Colombia) y James Mazepa (Estados Unidos). Actúa como jurado aprendiz Jathryn Johnson (Estados Unidos).


Para las colecciones de historia postal, el equipo está integrado por Klerman Lopes (Brasil), Andrés Schlichter (Argentina) y Dila Eaton (Paraguay). Yamil Kouri (Estados Unidos), es parte del grupo como jurado aprendiz.


NUEVA YORK 2016: UN MOTIVO CADA DÍA

Como informamos en una anterior entrega (ver EN MENOS DE UNA SEMANA SE INAUGURA NUEVA YORK 2016), cada uno de los ocho días que permanecerá abierta la Exposición Internacional de Nueva York estará dedicado a un tema específico, conforme el siguiente detalle:

Sábado 28 de mayo: Mundo de los sellos.

Domingo 29 de mayo: Aprender nunca termina.

Lunes 30 de mayo: Fuerzas Armadas.

Martes 31 de mayo: Encuentro entre la ciencia y los sellos.

Miércoles 1 de junio: Sello de los Estados Unidos.

Jueves 2 de junio: Las bella América y Naciones Unidas.

Viernes 3 de junio: Niños del mundo.

Sábado 4 de junio: Coleccionismo tópico.








Como es usual en las exposiciones filatélicas, para cada uno de estos días se han preparado matasellos conmemorativos cuyas imágenes, tomadas de la página oficial de la Exposición, presentamos para los interesados.

NOVEDADES FILATÉLICAS EN NUEVA YORK

Durante todos los días que dure la Exposición Internacional de Nueva York, habrá lanzamientos de nuevas emisiones, tanto de los Estados Unidos como de otros paises y administraciones postales que han preparado, en muchos casos, piezas filatélicas alusivas a la exposición y a la ciudad de Nueva York.

Los interesados pueden ver la totalidad de estas nuevas emisiones en el enlace ESTAMPILLAS NY2016.

Durante los dos primeros días de la Exposición se desarrollaron ya los actos de lanzamiento de dos emisiones norteamericanas. La primera, las hojas recuerdo de la Exposición; se trata de dos hojas con doce estampillas cada una, que reproducen los sellos emitidos el año pasado para anunciar el certamen, pero con los colores invertidos.

Imagen tomada del facebook de NY 2016

El domingo se puso en circulación la estampilla conmemorativa de los doscientos cincuenta años de la lucha contra la ley del timbre, que sería el antecedente de la independencia norteamericana.

Imagen tomada del facebook de NY 2016
Tanto la Administración Postal de las Naciones Unidas, como el correo austriaco, pusieron en circulación sendas emisiones postales por el día de las Fuerzas de Paz de las Naciones Unidas, mientras que Gambia, Ghana y Tuvalu presentaron emisiones dedicadas a la ciudad de Nueva York.

CONFERENCIA EN TRAJE DE ÉPOCA

Si Alexander Hamilton se hizo presente en la ceremonia inaugural de la Exposición Internacional de Nueva York, Benjamín Franklin protagonizó una de las conferencias que integran la extensa lista de actividades programadas para los ocho días del certamen. 

El sábado, a partir de las tres de la tarde, se realizó la reunión del Círculo de Estudio de la América Colonial, para el que se anunció la presentación del doctor Franklin sobre moneda local y tarifas postales.

La conferencia que desarrolló este tema estuvo a cargo del doctor Timothy O'Connor, quien rigurosamente vestido con traje de época, disertó sobre la historia postal de las trece colonias norteamericanas.

O'Connor es un conocido filatelista, especializado en la historia postal colonial de los Estados Unidos, quien ha dictado conferencias sobre el tema y ha sido premiado por su colección de historia postal de las trece colonias.

Asociaciones, grupos de estudio y diversas entidades filatélicas, han organizado charlas y reuniones con motivo de la Exposición de Nueva York. El programa completo lo pueden consultar en el enlace PROGRAMA NY 2016).


LATINOAMERICANOS EN NUEVA YORK 2016

Walter Britz, Presidente de la Comisión de Filatelia Tradicional de la Federación Interamericana de Filatelia, está presente en Nueva York 2016 y nos mantiene informados sobre diversos detalles de la exposición, por medio del blog de la Comisión a su cargo (ver el enlace BLOG FILATELIA TRADICIONAL).

De ahí, y de otros espacios en internet, hemos recopilado las imágenes que presentamos a continuación, y que muestran a los colegas latinoamericanos que se han hecho presentes en la Exposición de Nueva York y que, además de visitarla, cumplen con sus obligaciones como comisarios nacionales o dan una mano en las tareas de montaje de colecciones.

Walter Britz (Uruguay)

Los colombianos Ricardo Botero, Manuel Arrango y Darío Diez

Miguel Casielles, de Argentina, entrega colecciones y premios

Héctor Di Lalla y Miguel Casielles, de Argentina

Santiago Cruz, Manuel Arango, Yamil Kouri, Darío Diez, Alfredo Frohlich y Miguel Casielles

Miguel Casielles (Argentina) y Eduardo Boido (Uruguay)

Heinz Junge (Chile)

Yamil Kouri (Estados Unidos)
Pedro Meri (Venezuela)



ECUADOR EN NUEVA YORK 2016

Jaime Garzón, Comisario del Ecuador en Nueva York 2016,
don la colección ecuatoriana que se exhibe en el certamen
Jaime Garzón, Vicepresidente de la Asociación Filatélica Ecuatoriana, es el Comisario del Ecuador en Nueva York 2016, y le corresponde presentar ahí la única colección ecuatoriana que se exhibe en la Exposición.

Se trata de Ecuador, Postal Tax Stamps (1920-1958), de Juan Pablo Aguilar, colección en cinco marcos que incluye el primero y hasta el momento más completo estudio sobre los sellos ecuatorianos de sobretasa.

Las sobretasas postales se utilizaron en el Ecuador a partir de 1920, como impuesto al servicio postal, y permitían recaudar fondos para diversos objetivos: construcción de edificios para la administración postal, servicios sociales, escuelas, campañas de salud, etc.

Las sobretasas postales son un elemento esencial de las tarifas durante un buen período de la historia filatélica ecuatoriana. Hasta hace no mucho, se carecía de información básica sobre estos sellos, empezando por sus fechas de emisión y períodos de uso.

Esto impedía tener una idea clara, no solo sobre estas piezas, sino también sobre las tarifas postales durante buena parte del siglo XX.

La colección que hoy se expone en Nueva York, obtuvo ya medalla de oro FIAF en la Exposición Fin del Mundo 2015.

Otra colección se exhibe en Nueva York, que es de interés para la filatelia del Ecuador. 

Se trata del estudio que, en un marco, presenta el filatelista noruego Elvind Lund, sobre correo marítimo desde Guayaquil (1780-1865). 

Lund es conocido en nuestro medio por su premiada colección de la primera emisión ecuatoriana.

domingo, 22 de mayo de 2016

EL CENTAVO MAGENTA, UNO DE LOS ATRACTIVOS DE NUEVA YORK 2016

El centavo magenta de la Guayana Británica
El centavo magenta de la Guayana Británica, sin duda la estampilla más famosa del mundo, será uno de los atractivos para los visitantes de la Exposición Internacional de Nueva York. 

La pieza, que tras varios años de permanecer en la bóveda de un banco salió a la venta en junio de 2014, podrá ser admirada por las personas que visiten el Javits Center, entre el 28 de mayo y el 4 de junio próximos.

La Guayana Británica emitió sus primeras estampillas en 1850 y, seis años después, en 1856, la colonia utilizaba sellos impresos en Londres, por Waterlow and Sons.

Ese año, sin embargo, faltaron estampillas y, hasta que llegue el envío desde la metrópoli, el Director de Correos E.T.E. Dalton contrató con los editores de la Gaceta de Georgetown, Joseph Baum y William Dallas, la impresión de dos estampillas, una de un centavo y otra de cuatro, que cubrían las tarifas para impresos y cartas, respectivamente.

El diseño de las estampillas es el mismo: sobre papel de color se imprimió, en tipografía y con tinta negra, un barco de vela que ocupa el centro del sellos, junto con el lema de la colonia, Damus Petimusque Vicissim (Damos y pedimos recíprocamente); en los bordes, constan las palabras British Guiana Postage y el valor facial. El sello de un centavo está impreso en papel de color magenta y el de cuatro centavos se conoce en papeles de color magenta y de color azul.

La posibilidad de que las estampillas fueran falsificadas, aprovechando la impresión deficiente de los originales, llevó a que el Director de Correos disponga que los encargados de vender los sellos colocaran sobre ellos sus iniciales; se conocen cuatro distintas: E.T.E.D., E.D.W., W.H.L. y C.A.W.

De esta serie de estampillas provisionales, durante mucho tiempo no se conocieron más que ejemplares del sello de cuatro centavos. 

No fue sino hasta 1873 cuando Vernon Vaugham, un colegial de 12 años de Georgetown, hurgando entre algunos papeles familiares, encontró un sello de un centavo, en mal estado, sobre un fragmento del que los desprendió para incluirlo en su colección. La estampilla tenía cortadas sus cuatro esquinas, mostraba las iniciales E.D.W. y un matasellos de Demerara, con fecha 4 de abril de 1856.

Poco después, con la idea de obtener dinero para comprar más estampillas, Vaugham ofreció el sello en venta al comerciante Neil Ross McKinnon, quien pagó por él un valor equivalente a cerca de un dólar y medio.

Los sellos de 4 centavos, magenta y azul, de la emisión provisional de 1856

La colección de MacKinnon fue vendida a Wylie Hill, de Glasgow (Escocia), de donde el centavo magenta pasó a manos de Thomas Ridpath quien, consciente de su rareza, pagó por él la suma de 120 libras. 

Fue Ridpath quien ofreció la estampilla al más famoso coleccionista de la historia, Felipe von Ferrari, quien la adquirió por seiscientos dólares. La colección de von Ferrari acabó siendo subastada, a la muerte de éste, para pagar las indemnizaciones que Alemania debía a Francia como consecuencia de la Primera Guerra Mundial.

La subasta se realizó en 1922, y el comprador, Arthur Hind, pagó por la estampilla US$ 38.000, se dice que en una cerrada puja con el representante del monarca británico, Jorge V.

La viuda de Hind conservó la estampilla luego de la muerte de éste, en 1933, y solo salió a la venta nuevamente en 1940, cuando lo adquirió Frederick Small por una suma desconocida, que se calcula en alrededor de US$ 50.000.

Desde ese entonces se perdió la pista del centavo magenta, hasta que reapareció en 1970, cuando fue vendido por la casa Robert A. Siegel, en la suma de 240.000, al representante de un grupo de inversores de Pennsylvania, Irwin Weinberg.

Diez años después, en 1980, la misma casa Siegel subastó la estampilla en US$ 935.000, pagados por John E. du Pont. En 1996, du Pont fue acusado del asesinato de Dave Schultz y condenado a una pena de cuarenta años de cárcel; el centavo magenta permaneció, desde entonces, en la bóveda de un banco.

Al morir du Pont, en 2010, la estampilla más famosa del mundo pudo salir nuevamente al mercado. Sotheby's la ofreció en venta en junio de 2014 y obtuvo por ella el exorbitante precio de nueve millones y medio de dólares.

El centavo magenta es una pieza única. Si bien se han tejido historias acerca de la existencia de otros ejemplares, en algunos casos se comprobó que se trataba de falsificaciones y en otros no se ha pasado de la anécdota, como aquélla según la cual Arthur Hind habría comprado un segundo ejemplar por un alto precio, y lo habría quemado delante del vendedor.

Después de su última venta, el centavo magenta ha sido ya exhibido y, en pocos días, podrán verlo quienes visiten la Exposición Internacional de Nueva York.

EN MENOS DE UNA SEMANA SE INAUGURA NUEVA YORK 2016

Anverso y reverso de la medalla que se entregará a los expositores
participantes en la Exposición Mundial de Nueva York
El próximo sábado 28 de mayo se inaugura la Exposición Mundial de Nueva York, que permanecerá abierta en el Javits Center, de Manhattan, hasta el 4 de junio.

El acto de inauguración tendrá lugar a las nueve y cuarto de la mañana del sábado 28, y a partir de entonces la exposición estará abierta al público. El ingreso no tiene costo, pero se requiere un registro previo que, para ahorrar tiempo, puede hacerse en internet (ver el enlace NY2016 REGISTRO RÁPIDO)

Desde 1913, cada diez años se organiza una exposición mundial en los Estados Unidos. Para la que este año tendrá lugar en Nueva York, se espera la presencia de 250.000 visitantes.

Setecientas colecciones de 76 distintos países, que se exhibirán en 4.125 marcos, estarán presentes en esta exposición. Se han inscrito, además, 175 participaciones en la clase Literatura.

La ficha descriptiva rápida, en su versión en castellano, a la que pueden acceder en el enlace FICHA RÁPIDA, detalla los principales atractivos de los que podrán disfrutar quienes tengan la suerte de participar en esta Exposición.

Cada uno de los 8 días del certamen está dedicado a un tema específico: mundo de los sellos (28 de mayo), aprender nunca termina (29 de mayo), Fuerzas Armadas (30 de mayo), encuentro entre la ciencia y los sellos (31 de mayo), sello de los Estados Unidos (1 de junio), la bella América y las Naciones Unidas (2 de junio), niños del mundo (3 de junio) y coleccionismo tópico (4 de junio).

Todos los días, hasta el 3 de junio, habrá también ceremonias de lanzamiento de nuevas emisiones de los Estados Unidos y de las Naciones Unidas: Exposición de Nueva York, pacificadores de la ONU, revocar la Ley del Timbre, honrando el heroísmo extraordinario, 65 aniversario de la Administración Postal de las Naciones Unidas, la exploración de Plutón, los clásicos por siempre, parques nacionales y celebraciones vistosas.

La exhibición de rarezas mundiales, entre ellas la estampilla más famosa del mundo, el centavo magenta de la Guayana Británica; locales de venta de administraciones postales y comerciantes; subastas (ver la nota siguiente en este blog); reuniones y seminarios (ver CALENDARIO DE REUNIONES); presencia de personalidades y una muestra especial de sobres de primer día, son algunos de los puntos salientes de Nueva York 2016.

Sin duda no habrá tiempo para ver las 66.000 páginas de las colecciones expuestas, así que conviene revisar la lista del material en exhibición, para dedicarse a aquello que pueda resultar de más interés para cada uno. A los colegas latinoamericanos les preparamos ya, en entregas anteriores, la lista de las colecciones que tienen directa relación con nuestros países (ver los enlaces COLECCIONES EN NY 2016 y COLECCIONES DE INTERÉS).

SEIS SUBASTAS EN NUEVA YORK 2016

Desde el domingo 29 de mayo, hasta el viernes 3 de junio, importantes casas internacionales realizarán seis subastas en las que pondrán a disposición de los interesados piezas de verdadero interés filatélico, algunas de ellas verdaderas rarezas inalcanzables para la mayoría de los filatelistas.

Robert A. Siegel abrirá el ciclo el 29 de mayo, a la una de la tarde, con una subasta en la que se ofrecerán, como piezas destacadas, un sello de 5 centavos de la serie "Misioneros de Hawai", en sobre, con un precio estimado entre US$ 150.000 y US$ 200.000; y un sello de 13 centavos de la misma serie, sin uso (el mejor en existencia, según los organizadores y con un precio base de US$ 37.000). Habrá también piezas destacadas de la filatelia francesa

Misioneros de Hawai, 13 centavos sin uso (izquierda) y 5 centavos en sobre; dos piezas destacadas de la subasta de Robert A. Siegel,
que se realizará el 29 de mayo durante la Exposición de Nueva York
El lunes 30 de mayo, a las diez de la mañana, se realizará la subasta de Cristoph Gartner. en la que se ofrecen algunas piezas de los administradores de correo locales de los Estados Unidos.

Una nueva subasta de Robert A. Siegel se realizará el martes 31 de mayo, a las diez de la mañana; en ella se ofrecerán interesantes piezas de la filatelia clásica norteamericana.

Jenny invertido, posición 8, que se ofrecerá
en la subasta de Schuyler J. Rumsey,
el 1 de junio de 2016
La filatelia británica y norteamericana estarán representadas en la subasta de Schuyler J. Rumsey, que arrancará a las diez de la mañana del miércoles 1 de junio. 

La subasta incluye la colección Robert L. Marjovits de correo urgente norteamericano y, como pieza destacada, un Jenny invertido, posición 8, que se ofrece a un precio base de US$ 50.000.

El jueves 2 de junio, a partir de las nueve de la mañana, habrá otra subasta a cargo de Daniel F. Kelleher, quien pondrá a disposición de los filatelistas, dividida en alrededor de ochocientos lotes, la colección de Adolph J. Capurro, que incluye interesantes piezas de diversos países.

La última subasta se realizará el viernes 3 de junio, a partir de la una de la tarde, y estará a cargo de cuatro casas de subastas que conforman la Red Filatélica Global: H.R. Harmer, Corinphila, Heinrich Köhler y John Bull. Se incluyen en el catálogo de esta subasta sellos y colecciones de diversos países

SE CIERRA EL PLAZO PARA INSCRIBIRSE EN LA EXPOSICIÓN VIRTUAL EXPO AFINET 2016

El 1 de junio se cierra el plazo para inscribirse en la exposición filatélica virtual EXPO AFINET 2016, organizada por Ágora de Filatelia, y que se celebrará de forma virtual, entre el 1 de julio y el 31 de agosto próximos.

Esta interesante iniciativa estará abierta a todos quienes estén interesados en participar en cualquiera de las tres siguientes categorías: filatelia clásica, moderna e historia postal; filatelia fiscal, enteros postales y maximofilia; y filatelia temática y clase abierta.


Las colecciones deberán montarse en un mínimo de doce páginas y un máximo de ciento veintiocho, sin que se necesario que el número de hojas sea múltiplo de doce; cada participante podrá intervenir con hasta tres colecciones, pero en ningún caso podrá presentar más de ciento veintiocho páginas.

Todos quienes envíen sus colecciones, por medio magnético, recibirán un certificado de participación. No se asignarán puntajes ni medallas, pero se entregarán premios de acuerdo con las votaciones realizadas por los socios de AFINET.

Los interesados en participar pueden consultar el reglamento de la Exposición en el enlace EXPOSICIÓN VIRTUAL EXPO AFINET 2016.

LOS PRIMEROS TIMBRES TELEGRÁFICOS DEL ECUADOR (X): ¿EXISTIERON TIMBRES DE SERVICIO OFICIAL?

Son conocidas, entre los coleccionistas de timbres telegráficos ecuatorianos, dos series de timbres de servicio oficial, que los catálogos ubican en los años 1895 y 1897 y que, en ambos casos, son el resultado de resellas timbres fiscales del bienio 1887-1888.

La serie de 1895 la conforman dos sellos, uno de un centavo ultramarino y otro de dos centavos lila, ambos con un resello de tres líneas verticales, el primero con las palabras "Telégrafos / SERVICIO OFICIAL / 10 centavos" en color rojo y el segundo con la misma leyenda, en color azul, y con el valor de 20 centavos.


La serie de 1897 está conformada por cuatro timbres, dos de un centavo y dos de dos centavos, todos con un resello en óvalo y la leyenda "TELEGRAFO DE OFICIO"; para cada valor hay un resello en negro y otro en azul.


Tenemos serias dudas sobre la autenticidad de estos sellos, de los que no conocemos ejemplares legítimamente usados.

Esto porque, tal como se desprende de los reglamentos de telégrafos de la época, no solo que no había una tarifa especial para los telegramas oficiales, sino que expresamente se establecía que éstos no debían pagar valor alguno.

¿Para qué, entonces, se habrían impreso timbre telegráficos oficiales?

En el caso de la segunda serie, las tarifas de 1 y 2 centavos no corresponden a ninguna de las establecidas para el servicio telegráfico, lo que aumenta la duda acerca de su autenticidad.

En el caso de la primera serie, si bien no hemos encontrado documento alguno que establezca una tarifa para el servicio oficial, los valores de diez y veinte centavos sí corresponden a las tarifas usuales en ese tiempo. Pero de aquí surge otra pregunta: ¿para qué establecer un servicio oficial si éste paga las mismas tarifas que el ordinario?

Es bueno hacer notar, sin embargo, que la lista de precios de Agustín Albán, publicada en 1898, si bien no incluye la serie de 1897, sí hace referencia a la de 1895. Este es, hasta el momento, el único indicio que hemos encontrado a favor de la autenticidad de los timbres telegráficos oficiales de 1895, si bien Albán da como año de emisión de los mismos, 1896.

EL BILLETE DE CINCUENTA SUCRES Y LA SUSCEPTIBILIDAD DE UN PERIODISTA

A partir de la década del cincuenta del siglo pasado, el Banco Central del Ecuador modificó el diseño de los billetes y, para el de cincuenta sucres, escogió como imagen la Columna de los Próceres, ubicada en el Parque Centenario de Gauayaquil.

Los primeros billetes con el nuevo diseño fueron impresos por la firma británica Waterlow & Sons. En ellos se aprecia una vista aérea, desde la parte posterior de la columna. La misma imagen se utilizó en los billetes trabajados por Thomas de la Rue y fue la que se empleó en la última emisión, realizada en 1988.


Para algunas de las emisiones, la impresión de los billetes se encargó a la American Bank Note Company. Esta casa impresora modificó la imagen de la Columna de los Próceres y utilizó un dibujo en el que ésta se miraba de frente. La última vez que se usó esta ilustración fue en la emisión de 1976.

Si bien la imagen con la toma aérea de la columna fue la primera en utilizarse y había circulado por más de veinte años, en 1977 un periodista del diario El Universo de Guayaquil, que al parecer no había visto más billete de cincuenta sucres que el impreso por la American Bank Note Company, protestó por lo que consideraba "una irreverencia involuntaria" en el dibujo utilizado por Waterlow & Sons y Thomas de la Rue.


El 21 de agosto de 1977 se publicó en el diario mencionado una pequeña nota, en la que se sostenía que había un diseño correcto y otro incorrecto del billete. El primero, obviamente, era el que mostraba la Columna de los Próceres de frente; el otro, el que lo hacía desde atrás. 

El autor de la nota se preguntaba si era posible rendir homenaje a un prócer, presentando el conjunto arquitectónico que lo honra graficado desde atrás. Es, decía, "una irreverencia tal como si se imprimiese un dibujo de la estatua ecuestre de Bolívar captado (sic) desde un ángulo posterior".

La queja no trascendió y los billetes de cincuenta sucres siguieron circulando en las dos versiones, sin que para quienes los usaban fuera  motivo de preocupación el dibujo o la supuesta irreverencia.

GUÍA PARA PRINCIPIANTES: DENTADOS Y ODONTÓMETROS

Decíamos, en la entrega anterior, que parte del equipo que requiere un filatelista tiene que ver con determinados elementos de las estampillas, como el papel, o el dentado.

En lo que tiene que ver con este último, la dificultad que implicaba desprender de la plana cada sello hizo que pronto se establecieran sistemas de separación, de los cuales el más extendido es el dentado: una serie de perforaciones que dividen a las estampillas unas de otras, y permiten separarlas con facilidad.

Pues bien, el dentado no es solo un sistema de separación, sino que varía de un sello a otro, pues hay dentados más abiertos y dentados más apretados y, en algunos casos, estampillas aparentemente iguales se diferencian, precisamente, por el dentado.

Odontómetro

Para medir este último se ha establecido un método: el dentado de una estampilla depende del número de dientes que ésta tiene en dos centímetros; y para determinar el dentado de los sellos existe un instrumento muy simple, el odontómetro.

El uso del odontómetro

Éste no es otra cosa que una pieza de cartulina, plástico o metal, en el que constan dibujados los posibles dentados, con su respectivo número; para establecer el dentado de una estampilla, basta con hacer coincidir los dientes de esta última con el dibujo que consta en el odontómetro.

Odontómetro electrónico o perfotronic

En la actualidad existen odontómetros electrónicos, conocidos como perfotronics, que permiten mayor precisión a la hora de establecer el dentado de un sello.


sábado, 14 de mayo de 2016

DIEZ MIL VISITAS

El 24 de enero de 2016 publicamos la primer entrega de este espacio dedicado a la filatelia y la numismática; esta semana, a poco de cumplir los cuatro meses, hemos superado las diez mil visitas, provenientes de 56 diferentes países.


Gracias a todos ustedes por su apoyo y colaboración. Esperamos que las notas que aquí se publican sean de utilidad para ustedes y que gracias a ellas puedan incrementar sus conocimientos filatélicos, compartir noticias e ideas, y contar con un medio de difusión y hermanamiento entre quienes disfrutamos con la colección y estudio de sellos postales.

Como siempre, estamos abiertos a sus comentarios, críticas y colaboraciones. Consideren éste como su espacio. Gracias por visitarnos y seguir haciéndolo.

AVANZAN LOS PREPARATIVOS PARA CÓRDOBA 2016

Una vez concluida la exposición internacional de Nueva York, América volverá los ojos hacia Córdoba (Argentina), donde entre el 20 y el 27 de agosto se realizará la cita de la filatelia continental.

Los colegas argentinos, y en particular los del Centro Filatélico Mediterráneo de Córdoba, principales responsables del certamen, están dedicados a poner a punto todo lo necesario para recibir a los filatelistas americanos. 

En las reuniones mantenidas en los últimos días, se ha preparado ya un primer borrador del programa de actividades que, una vez definido se pondrá en consideración de todos los interesados. También se nos ha informado que el jueves pasado, 12 de mayo, socios y colaboradores del Centro Filatélico Mediterráneo se reunieron con las autoridades de la Región Centro del Correo Argentino, para coordinar el trabajo común que realizan con miras a la exposición.

Un aspecto de la reunión entre el Centro Filatélico Mediterráneo y las autoridades de la Región Centro del Correo Argentino
(tomado de https://www.facebook.com/fliadilalla?fref=ts)
No hay que olvidar que, junto con la Exposición, Córdoba será sede del Congreso de Filatelia Tradicional e Historia Postal y de la L Asamblea de la Federación Interamericana de Filatelia.

Esta semana, el Consejo Ejecutivo de la Federación Interamericana de Filatelia designó al Coordinador que, como representante de la Federación continental, participará en los trabajos de la Exposición de Córdoba.

Se trata de José Raúl Lorenzo Sánchez, Presidente de la Federación Filatélica Cubana, quien se sumará al trabajo de los organizadores para asegurar el éxito de la Exposición Continental. El flamante Coordinador FIAF forma ya parte del equipo encabezado por Orlando Eloy Corres, Veedor de la Federación Argentina de Entidades Filatélicas; Roberto Néstor Cravero, Comisionado General de la Exposición; y Omar Uanini, Presidente del Centro Filatélico Mediterráneo.

De izquierda a derecha, José Raúl Lorenzo Sánchez, Coordinador FIAF; Orlando Eloy Corres, Veedor de la FAEF;
Roberto Néstor Cravero, Comisionado General; y Omar Uanini, Presidente del Centro Filatélico Mediterráneo

Catorce países han confirmado ya su participación en el certamen y doce de ellos han designado a los respectivos comisarios; pueden ver sus nombres en el siguiente cuadro.

BOLIVIA
Federación Filatélica Boliviana
VILLARROEL DE PEREDO, MARTHA
BRASIL
Federación Brasilera de Filatelia
FRITZEN, LUIS CARLOS
CANADA
Royal Philatelic Society of Canadá
TAYLOR, JAMES ROBERT
CHILE
Federación de Sociedades Filatélicas de Chile
JUNGE, HEINZ
COSTA RICA
Federación de Entidades Filatélicas de Costa Rica
DIAZ JIMENEZ, LUIS FERNANDO
CUBA
Federación Filatélica Cubana
LORENZO, JOSE RAUL
ESPAÑA
Federación Española de Sociedades Filatélicas
PANES CANTERO, JUAN
ESTADOS UNIDOS
American Philatelic Society
VERGARA, CARLOS
MEXICO
Coleccionistas Filatélicos Unidos de México
URZUA BARBOSA, CARLOS
PARAGUAY
Centro Filatélico del Paraguay
GAVILAN ORUE, FATIMA
PERU
Asociación Filatélica Peruana
SAMAME y SAMAME, ALDO
URUGUAY
Federación Uruguaya de Filatelia
VOLPE, HECTOR

Colombia y Venezuela han comprometido su participación y pronto designarán a los respectivos comisarios nacionales. Se espera también para estos días la confirmación oficial de San Pedro y Miquelón.

Bolivia, España, Estados Unidos y México, se han comprometido a entregar premios especiales para que se entreguen a los participantes cuyas colecciones se hayan acreedoras a ellos.

Les recordamos que falta solo un mes para inscribirse en la Exposición de Córdoba; el plazo vence el próximo 17 de junio, así que tanto las asociaciones nacionales, como los filatelistas interesados en participar, deben tomar ya las medidas para hacerlo. El Reglamento de la Exposición lo pueden consultar en el enlace REGLAMENTO CÓRDOBA 2016.

CIEN MEDALLAS DE ORO PARA TILLARD

Como muchos saben, San Pedro y Miquelón es un Departamento Francés de Ultramar, conformado por dos islas principales y varios islotes, frente a las costas atlánticas de Canadá; cuenta con un servicio postal autónomo, que emite sus propias estampillas, y por eso forma parte de la Federación Interamericana de Filatelia, y participa activamente, y siempre de manera destacada, en las exposiciones que ésta organiza.

La filatelia es una actividad destacada en el archipiélago, y tanto la radio como la televisión difunden entre la colectividad los principales acontecimientos relacionados con el coleccionismo de sellos postales.

Recientemente, los medios de comunicación celebraron un acontecimiento importante para la filatelia de ese territorio francés: la centésima medalla de oro obtenida por el ex-Presidente y destacado integrante del Club Filatélico de San Pedro y Miquelón, Jean-Jacques Tillard.

Jena-Jacques Tillard (izquierda) recibe, de manos de Reinaldo Macedo, Presidente de la Federación Brasileña de Filatelia,
el premio obtenido en EXPOAFE 15O AÑOS, realizada en Quito en septiembre y octubre de 2015

Tillard participó en abril pasado en la Exposición Filatélica del Club de Lakeshore, en Canadá, con su colección Saint-Pierre et Miquelon, le type "Groupe" 1892-1908, y obtuvo medalla de oro y el premio a la mejor colección extranjera (pueden consultar el palmarés completo en PALMARÉS LAKESHORE 2016).

Esta centésima medalla es sin duda un hito importante en la vida filatélica de Jean-Jacques, y llega diez años después de la primera presea de ese nivel, recibida precisamente en la edición 2006 de la Exposición de Lakeshore. Un año después llegaría la primera medalla de oro en una exposición internacional (San Petersburso, 2007) y, en 2013, la primera medalla de oro grande de nivel mundial (Río de Janeiro) con su colección The overprints of Saint-Pierre et Miquelon in the 19th Century.

En la Exposición Fin del Mundo 2015, la misma colección obtuvo el gran premio del certamen.

La colección de Tillard se presentará nuevamente en Nueva York 2016 y esperamos que le permita alcanzar su medalla de oro 101. Felicitaciones Jean-Jacques.

LOS PRIMEROS TIMBRES TELEGRÁFICOS DEL ECUADOR (IX): LA EMISIÓN DE 1899

La serie de timbres telegráficos de 1899
Luego de cinco años de utilizar resellos y timbres cuya validez había terminado, el Ecuador volvió a ordenar una serie de timbres telegráficos, esta vez a la casa Waterlow & Sons Ltd., de Londres, que se había convertido por esos años en el proveedor de especies valoradas para el gobierno.

Fueron tres valores (10, 20 y 40 centavos), con los retratos de dos próceres de la independencia ecuatoriana (Juan Salinas y Carlos Montúfar en los timbres de 20 y 40 centavos) y uno de la colombiana (Antonio Ricaurte, en timbre de 10 centavos). La inclusión de estos retratos fue parte de una política de creación del  nuevo imaginario laico, que debía sustituir al del estado confesional desplazado por los liberales a partir de la revolución de 1895 (hicimos referencia a esto en una nota anterior, EL USO POLÍTICO DE LOS SELLOS POSTALES).

Prueba de impresión del centro del timbre de 20 centavos.
En la esquina inferior derecha, el número y la fecha
De estos timbres existen pruebas de color en minipliegos de nueve timbres cada uno, con hoyo de seguridad y la inscripción en dos líneas diagonales, en negro, "WATERLOW & SONS LTD / SPECIMEN".

Existen también algunos ejemplares de una prueba de impresión numeradas del círculo central, con el retrato de Juan Salinas, que se incluyó en el timbre de 20 centavos.

Todos los catálogos dan 1900 como año de emisión de estos timbres, pero en realidad se pusieron en circulación en agosto de 1899. En efecto, en los balances de especies postales de la época consta que fue en ese mes que ingresaron a la Sección de Especies del Ministerio de Hacienda y empezaron a entregarse a las oficinas telegráficas.

Según el registro, se recibieron cincuenta mil quinientos timbres de diez centavos, un millón de veinte centavos y doscientos mil de cuarenta centavos.

En diciembre de 1899 se eliminan los timbres del registro de especies, y a partir de enero del año siguiente empiezan a utilizarse únicamente formas telegráficas, a las que nos referiremos en su momento.


Los timbres de la emisión de 1899, entonces, se usaron con seguridad entre agosto y diciembre de 1899, y probablemente en los primeros meses de 1900; por eso se los encuentra casi siempre nuevos, siendo muy escasos los ejemplares usados.

A partir de 1900, y durante la década siguiente, el servicio telegráfico dejó de usar timbres y los reemplazó por fórmulas telegráficas, documentos en los que el usuario escribía el mensaje y que tenían el timbre preimpreso.

Mini pliegos con las pruebas de color de la serie de timbres telegráficos de 1899

CORREO Y EPIDEMIAS: LA FIEBRE AMARILLA EN GUAYAQUIL (1842)

Las cartas, papeles que van de mano en mano, han sido consideradas como fuente de transmisión de enfermedades, y cuando las epidemias diezmaban poblaciones sin que existieran conocimiento científicos suficientes para entenderlas o controlarlas, se extremaban medidas para evitar posibles contagios. Desinfectar la correspondencia era uno de ellos.

En 1842 se desató en Guayaquil una epidemia de fiebre amarilla, durante la cual se destacó la actitud valiente y decidida de Vicente Rocafuerte, entonces Gobernador de la provincia; el 31 de agosto de ese año había llegado al puerto la goleta británica Reina Victoria con varios enfermos a bordo, pero el encargado de la inspección sanitaria no hizo observación alguna y autorizó el desembarco; la enfermedad se extendió por la ciudad y, según Julio Estrada Ycaza, mató a cinco mil personas hasta febrero de 1843 (El Puerto de Guayaquil, tomo 2, Archivo Histórico del Guayas, 1973, p. 89), lo que en ese tiempo representada la cuarta parte de la población de la ciudad.
 
Guayaquil en 1846, según Cayetano Osculati

La inspección de sanidad era un requisito que debían cumplir los buques que arribaban a Guayaquil, para que se pudiera autorizar el desembarco de quienes en ellos venían. Había, para el efecto, un Reglamento de Visitas de Sanidad en los puertos del Ecuador, que regulaba las medidas que debían adoptarse para evitar que la ciudad pudiera verse afectada por las enfermedades que se hubieren producido a bordo de los barcos.

Una de esas medidas se refería al tratamiento que debía darse a la correspondencia transportada por los buques.

“Los buques que traigan correspondencia oficial o del público, y tengan alguna novedad por la que se declare en cuarentena –decía el artículo 9 del Reglamento-, podrán sin embargo desembarcarla, pasándola antes por la desinfección, por medio de los cloruros”.

Desatada una epidemia, los barcos preferían no arribar a los puertos afectados (la fiebre amarilla generó una grave crisis económica en Guayaquil) y los puertos cercanos adoptaban medidas para protegerse ante posibles contagios.

“El Correo”, un periódico que se publicaba en Guayaquil en ese tiempo, dio a conocer en su número 69, correspondiente al 22 de enero de 1843, las medidas que se habían adoptado en el Perú para evitar que la fiebre amarilla se extendiera a ese país.

Todo buque proveniente de Guayaquil, o de cualquier otro puerto del norte, hasta Panamá, decía un Decreto del encargado del Poder Ejecutivo en ese país, sufrirá “la más rigurosa cuarentena”.
 
Vicente Rocafuerte durante la epidemia de fiebre amarilla de 1842 (alto relieve en el monumento a Rocafuerte en Guayaquil)

También en este caso, la cuarentena incluía medidas para desinfectar la correspondencia. “Las cartas –decía el Decreto- se picarán y mojarán en vinagre antes de pasar a la estafeta”.

En el número 70 de “El Coleccionista Ecuatoriano” se publicó un Decreto de Antonio Elizalde, Gobernador de Guayaquil, que en 1849 dictó disposiciones para impedir el contagio de la epidemia de cólera que se había extendido desde California hasta Panamá, en el que se explica con detalle el procedimiento de desinfección.

La correspondencia transportada por los buques declarados en cuarentena debía entregarse en una caja de madera “de media vara de largo y una tercia de ancho, y de una altura proporcionada, agujereada por la parte de abajo y con un gancho en la mitad de la parte de arriba”. En el bote que debía recoger el correo se debía recibir la caja utilizando un asta, para que no sea necesario abordar el barco.


Recibidas las cartas en el interior de la caja, ésta debía sumergirse en agua salada por dos minutos, “después de lo cual se suspenderá al aire para que destile; y una vez que haya verificado la completa destilación se extenderá en el bote la correspondencia. Al llegar a tierra. Se picarán todas las cartas e impresos con puntas preparadas al efecto, y se sumergirán por espacio de dos minutos en una cuba de vinagre; y pasadas estas operaciones se procederá a formar la lista de la correspondencia”.

LA REINA DE LA NUMISMÁTICA ECUATORIANA. LA MONEDA DE 8 REALES DE 1846

Más que rareza, dice Eduardo Carrión Letort de la moneda de plata de 1846, acuñada en la Casa de Moneda de Quito, "tiene un prestigio que otras monedas no igualan". Por eso no vacila en califcarla como la reina de la numismática ecuatoriana.

"Pieza insigne" la llama Ramiro Reyes, quien afirma que su importancia se debe a que es la única pieza ecuatoriana con valor nominal de ocho reales, con el formato modular de los pesos coloniales y de cuidadoso acabado y apreciable belleza; a su escaso tiraje se suma el hecho de que casi la totalidad de las monedas salieron del país.

Derrocado el presidente Juan José Flores, como consecuencia de la revolución del 6 de marzo de 1845, la Asamblea Constituyente reunida en Cuenca designó para sustituirlo a Vicente Ramón Roca, quien se propuso poner en orden las finanzas nacionales y, para ello, el 29 de diciembre de 1845, ordenó que la Casa de Moneda de Quito acuñe pesos fuertes de ocho reales, con un peso de veinte gramos y ley de diez dineros.

Moneda de plata de 8 reales de 1846, vendida en US$ 21.000 en la subasta de mayo de 2010 de la casa Ira&Larry Goldberg

Al año siguiente, 1846, se acuñaron 1386 piezas para cumplir con el mandato presidencial. Las monedas tenían en el anverso el busto de la República, con las palabras EL PODER EN LA CONSTITUCIÓN en el semicírculo superior y el año de acuñación al pie, junto con la indicación 10D (10 dineros) y 20G (20 gramos). Al reverso se grabó el escudo de la República adoptado por la Constituyente de 1845, escudo en el que se mostraba la nueva bandera bicolor (blanca y celeste) que sustituyó a la tricolor; en el semicírculo superior las palabras REPUBLICA DEL ECUADOR, al pie el lugar de acuñación, el valor facial (8 reales) y las iniciales GJ, del ensayador Guillermo Jameson. El canto de la moneda tenía un cordón encadenado, como medida de seguridad contra falsificaciones.

Como bien anota Ramiro Reyes, la moneda cumplía propósitos de orden político: materializar el orgullo nacional tras el triunfo de la revolución anti floreana y "mostrar a un país que iniciaba una nueva etapa en la que se reafirmaba su soberanía y las expectativas de progreso".

Si la idea era contar con una moneda fuerte, a la par de las extranjeras, no se hizo lo necesario para que este propósito se cumpla, pues mientras el valor nominal de la moneda era de 8 reales, el intrínseco alcanzaba los 10,7 reales. Esto hizo que en lugar de usarla para las transacciones, empezara a ser objeto de atesoramiento y fuera retirada rápidamente de circulación.

Según los archivos de la casa Heritage, en los últimos diez años se han subastado seis piezas de ocho reales de 1846, las que mayor precio alcanzaron fueron dos que se vendieron cada una en US$ 5.462,50, la primera en enero de 2007 y la segunda en abril de 2012. El precio más bajo que se pagó por una de estas monedas en la referida casa de subastas fue de US$ 3.055, en enero de 2015, por una pieza lavada.

En mayo de 2010, en la subasta de Ira&Larry Goldberg, se pagaron US$ 21.000 por una moneda de 8 reales de 1846