Juan Pablo Aguilar Andrade
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Los primeros enteros postales ecuatorianos fueron tarjetas de dos y tres centavos que se pusieron en circulación a inicios de 1884; al 14 de febrero de ese año corresponde el uso más antiguo que se ha reportado de una de esas tarjetas.
Hasta hoy no se conocer autorización oficial ni documento alguno que permita establecer los detalles de esta emisión, que usó como modelo las primeras tarjetas que se pusieron en circulación en Uruguay, en 1878. Solo sabemos, por la inscripción al pie de las tarjetas, que fueron impresas en Quito, en la Imprenta de la Novedad.
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| Tarjeta entero postal de dos centavos, primer emisión ecuatoriana impresa en La Novedad |
El trabajo de impresión fue cuidadoso y la cartulina utilizada de muy buena calidad. Solo se conocen, en esta emisión, variedades en el color del escudo de armas y el valor facial, que va desde el violeta hasta el lila.
En un aviso publicado en la Guía de Quito, de Adolfo Jiménez, en 1894, se afirma que la imprenta tiene quince años de existencia, por lo que debió establecerse en 1879. Los primeros trabajos que hemos podido ubicar, impresos en La Novedad, son del año 1881: un folleto sobre la candidatura presidencial de Pedro Carbo y el discurso de Antonio Guerra en la apertura de clases de la Universidad de Quito, este último fechado en octubre de ese año.
Un folleto, titulado Máximas de la Divina Sabiduría, se publico en La Novedad en 1883 y, en el pie de imprenta, aparece el nombre del impresor, José Guzmán Almeida. En el anuncio de 1894, Guzmán aparece como uno de los empleados de la imprenta, junto con Manuel J. Ribadeneira, Pedro Cevallos, Moisés Torres, Elías Enríquez y Carlos Villalovos.
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| La casa de Dolores Cevallos; a la derecha, la calle Sucre, a la cual daba el local de La Novedad y el anuncio ´publicado en El Nacional, que informa sobre el nuevo local de la imprenta. La foto fue tomada de la página de Héctor López Molina, Los Ladrillos de Quito |
Un folleto, titulado Máximas de la Divina Sabiduría, se publico en La Novedad en 1883 y, en el pie de imprenta, aparece el nombre del impresor, José Guzmán Almeida. En el anuncio de 1894, Guzmán aparece como uno de los empleados de la imprenta, junto con Manuel J. Ribadeneira, Pedro Cevallos, Moisés Torres, Elías Enríquez y Carlos Villalovos.
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| El discurso de apertura de las clases en la Universidad de Quito (1882). Primer trabajo que hemos encontrado, impreso en La Novedad |
La casa de Dolores Cevallos está ubicada en la esquina de las calles Sucre y García Moreno, frente a la iglesia de La Compañía, en el Centro Histórico de Quito. Allí estuvo ubicada, originalmente, una casa de propiedad de los Jesuítas que a mediados del siglo XIX fue comprada por José Cornejo Ribera. El nuevo propietario derrocó la casa construyó la hoy existente bajo la dirección de Juan Bautista Washington de Mendeville, Cónsul de Francia en Quito, a quien se deben varias construcciones realizadas en la ciudad (mayor información sobre la casa pulsando AQUÍ).
Lo más probable es que los primeros enteros postales ecuatorianos hayan sido impresos en ese lugar.
Lo más probable es que los primeros enteros postales ecuatorianos hayan sido impresos en ese lugar.
Según el extenso anuncio publicado en la Guía de Quito en 1894, para ese entonces la imprenta había cambiado nuevamente de local y funcionaba en la calle Venezuela, en la cuadra occidental entre la Plaza de la Independencia y la calle Sucre, a una cuadra del emplazamiento anterior. Para entonces, junto con José María Proaño, a quien se identifica como Director, aparece como propietario José Ignacio Proaño y, aunque el negocio principal sigue siendo la imprenta ("oficinas de imprenta, litografía, grabado y encuadernación"), funciona también como una agencia general de negocios que tiene a su cargo toda clase de negocios mercantiles.
En 1894, La Novedad ofrecía servicios de imprenta, grabado, litografía y encuadernación. Su departamento de grabado se anuncia como capaz de confeccionar estampillas, timbres y tarjetas postales.
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| Encabezado del extenso anuncia publicado a partir de la página 274 de la Guía de Quito, en 1894 |
En 1894, La Novedad ofrecía servicios de imprenta, grabado, litografía y encuadernación. Su departamento de grabado se anuncia como capaz de confeccionar estampillas, timbres y tarjetas postales.
Las primeras tarjetas entero postales, impresas en La Novedad, tuvieron poca circulación, pues a mediados de 1884 fueron sustituidas por otras, de similar diseño pero de muy inferior factura, impresas por Víctor Montoya.
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