Juan Pablo Aguilar Andrade
actualidadfilatelica@gmail.com
Poca atención han merecido, en nuestra historia filatélica, los diseñadores de los sellos postales ecuatorianos, pese a que en no pocos casos las piezas que circularon con nuestra correspondencia salieron de la mano de reconocidos artistas nacionales.
Es el caso de una de esas estampillas que por muy comunes y por estar en las manos de todos los coleccionistas, son tomadas en cuenta únicamente para llenar un espacio en el álbum; me refiero al sello verde de dos centavos para el pago de la sobretasa Casa de Correos y Telégrafos de Guayaquil (Scott RA29).
Esta sobretasa se creó a fines de 1933, para que sea cobrada a partir del 1 de enero del año siguiente. En un inicio se utilizaron sellos provisionales (el primero, un timbre fiscal verde resellado en azul con las palabras CASA / de / Correos y / Telégrafos / de / Guayaquil), pero se dispuso imprimir un sello definitivo y, para ello, algo que se había hecho ya en esos años, debía convocarse un concurso para escoger el diseño más adecuado.
Hecho el concurso, el jurado calificador otorgó el primer lugar, y el premio de doscientos sucres, a Guillermo Latorre (1896-1986), artista quiteño formado en la Escuela de Bellas Artes, conocido fundamentalmente como caricaturista.
La alegoría de correos y telégrafos que consta en este sello común y corriente pertenece, entonces, a ese reconocido artista ecuatoriano.
Las estampillas, que empezaron a utilizarse a partir de finales de 1934, se contrataron con Harrison & Sons, de Londres. Se hicieron diez millones de ejemplares.
No hay comentarios:
Publicar un comentario