Al igual que los sobres de primer día, las tarjetas máximas son productos filatélicos creados a partir de una emisión de sellos postales.
Se trata de tarjetas postales en las que se busca una triple identidad: la imagen de la tarjeta debe ser la misma (no necesariamente idéntica) que la de la estampilla que a ella se adhiera, y del matasellos con que se cancela esta última.
Tarjeta máxima con la imagen de la Puerta de la Luna (Córdoba), con la misma imagen en el sello, de la serie Arcos y Puertas Monumentales, y en el matasellos |
Generalmente se trata de piezas preparadas el primer día de emisión, y es el matasellos correspondiente el que cancela la estampilla.
Cuando la imagen del matasellos es distinta a la de la tarjeta y la estampilla, se dice que se trata de una variante.
Variante. El matasellos no guarda concordancia con la tarjeta y la estampilla |
Como ocurre con los sobres de primer día, el carácter de piezas preparadas resta valor a las tarjetas máximas a la hora de incluirlas en colecciones competitivas, aunque hay casos en que su presencia puede justificarse (mostrar elementos que aparecen incompletos en el sello, por ejemplo). De todos modos, su uso debe ser siempre medido y cuidadoso.
Claro que la belleza de estas piezas las vuelve, por sí mismas, en motivo de colecciones especializadas y ha generado una disciplina específica dentro de la filatelia: la maximofilia.
La pieza del puente de Alcántara de Toledo, no es una variante, no es ni máxima, no tiene concordancia de lugar, está matasellada en Madrid y el puente está en Toledo. Para denominar a una tarjeta máxima variante debemos partir del mismo sello con una tarjeta postal y matasellos distintos.Saludos.
ResponderEliminarJuan Antonio Casas Pajares, de la Asociación Española de Maximofilia ASEMA.